Hace 3, 4 noches... no, menos, como 5 noches que me ha costado quedarme dormida. Será que he tomado siesta en la tarde? será que hace calor? serán los medicamentos que en sus efectos adversos producen insomnio? será que no me amas?
Si es por los medicamentos, la verdad es que no creo porque se supone que los efectos no deberían aparecer aún...
Wherever...
Anoche, sumergida en mi nuevo insomnio, pensé muchas cosas. Como por ejemplo, me puse a recordar una ocasión hace un tiempo atrás en que yo estaba en la oficina, junto a dos ex compañeros y los tres conversábamos mientras una de mis ex compañeras comía cubanitos.
Cuando recién abrió el paquete, me ofreció, y yo me negué, seguimos conversando y 1 minuto después, volvió a estirar el envase para ofrecerme. Esta segunda vez saqué un cubanito...
Ni siquiera me gustan los cubanitos, tienen un sabor rancio, y si quiero causarme una enfermedad a largo plazo por andar comiendo dulces, pues al menos que sea con dulces que valen la pena, no? Pero ya no podía hacer nada, el jodido cubanito estaba en mi mano y tuve que tragármelo.
Mas tarde le comenté la situación a una amiga y me dijo que ella hacía lo mismo, lo que hizo mi compañera, que ofrecía una primera vez y asumía que esa primera negativa era falsa, así que ofrecía una segunda vez con amenazas de no ofrecer nunca mas en la vida.
Y como no podía dormir anoche me puse a pensar en esta sociedad qlia que no concibe el NO en su colectivo, al punto, de que yo misma me veo envuelta y debo prepararme previamente para decir que no, básicamente porque el respeto por el NO es tan inexistente, que una se enfrenta al escenario de que si te niegas a algo solo conseguirás que te sigan insistiendo, como la mujer que ofreció cubanitos.
Me puse a pensar que yo estaba distraída, que si, tenía hambre y que mientras estaba hablando y pensando en otras cosas, inconscientemente tomé algo de comer que se me ofreció, porque para empezar, no estaba en mi estado mental de NO porque ya había dicho que no quería comer la weá la primera vez. Pero fuera de eso... las razones dan lo mismo, no? si digo que no es mi puto problema, da lo mismo si es timidez, si es vergüenza, si es que creo que un cubanito me va a causar diabetes o si en el fondo solo me gusta el sufrimiento de pasar hambre mientras el resto come... todo eso es mi puto problema... o no?
Aún siento el sabor rancio de ese cubanito mal habido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario