Mi mamá, dios la bendiga, no es un persona que se caracterice por su estado de alerta o por su amplio poder de observación. Es lo que se conoce en mi pueblo como ser "pajarona".
Hace un par de meses, estábamos almorzando y se puso a conversarme algo, pero se interrumpió en la mitad de su monólogo para comentarme lo siguiente:
-Oye que tienes las orejas chicas tu.
Yo me reí un par de horas... días, si contamos los lapsos en los que recordaba su comentario y me volvía a reír. Le conté el evento a todos mis conocidos, incluso a la mujer de cencosud que me llamó para ofrecerme un préstamo. No es cierto, pero siento que sería un arma poderosa, no? como abrazar a un paco en una protesta, una cosa que descoloca al bando enemigo sin herirlo realmente. Es cierto, el pobre vendedor de cencosud no va a conseguir venderme su préstamo y perderá algo de su tiempo, pero tendría una historia para contar.
Lástima que los odio y solo les corto cuando escucho las palabras mágicas: "habla con fulanito, ejecutivo de cencosud... (corte)", "habla con sutana, ejecutiva de entel... (corte)". Así, por siempre.
Y siguiendo con mi mamá, bueno, tenemos que retornarnos a mi, porque éste blog de eso se trata, no? Y ocurre que esta semana me atacó el resfrío mensual. No sé si habrá sido el frío, el corticoide, un bicho de transporte público o un bicho que trajo Rodrigo o que trajo que mi cuñada o el lechero, o el jardinero. Vaya a saber una.
Ha sido un resfrío que se ha tomado su tiempo, y que por lo tanto, no sé cuánto le queda. Empezó por allá por el domingo, con un dolor de garganta que me ha durado hasta ayer... algo piola. La congestión no se ha manifestado abiertamente hasta hoy.
Y bueno, desde el martes que yo le estaba diciendo a mi mamá que estaba resfriada, que me dolía la garganta, que... wherever. Pero mientras le explicaba cosas ayer, me dice "estas resfriada, Cathy".
Si hubieramos sido inglesas, pues le hubiera dicho "No shit, Sherlock", pero no lo somos, así que me limité a decirle que llevaba días resfriada.
"Si, pero hoy se te nota" remató.
Mujer observadora, claro está.
