martes, 5 de junio de 2018

Dinero mal habido

Debo decir que una cosa que me hace muy feliz dentro de los placeres burgueses, es comprar alguna huevada para la casa, un mueble, un juego de sábanas, un juego de ollas, o cualquier cosa de ese estilo que embellezca ese lugar donde paso menos de 1/3 de la semana probablemente.
El problema de trabajar en algo que no te llene o que incluso te aburre, es que el dinero que ganas suele sentirse mas "caro" por decirlo de alguna forma. No es simplemente plata, es la visión de tu sacrificio allí, entonces gastarlo en cosas que al final no valen la pena, suele ser horriblemente doloroso. Como una vez que me financié unas vacaciones en las que quise ir a la playa pero no pude ir y solo volví de ese lugar con cuestionamientos existenciales indeseados y con conocimientos sobre el pasado que no me interesaba tener.
Cuando gastas dinero de un trabajo no amado, no es el dinero lo que se va, es el reflejo de tu tiempo y tu vida invertido en eso, es como si tuviera que hacer una cola, todo un día, sin hacer nada para poder conseguir la mitad de un libro.
Pero me gusta comprar cosas para la casa, me hace sentir que en algo aporto, y así me siento menos sanguijuela en éste mundo.

Embellecer... se me hace una palabra funny, pero mas funny es hermoseo. Hermosear... se lee raro, no? es como para gritarle a algún acosador callejero "y por qué no me hermoseai ésta mejor?".
Ay, que no me vayan a leer, que me van a terminar tapando a memes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario