Y bueno... empecé a leer el libro, y no entendí nada.
Mentira, porque en realidad, caché que el mismo traductor del libro andaba pelando al pobre Henri por "simplón". Pero estoy siendo carbonera, la verdad es que solo dijo que otros autores y filósofos lo han encontrado simple, ya que básicamente, al parecer, por lo que leí, el caballero se dedicaba a filosofar sobre cosas simples, como por ejemplo: La risa.
Si, yo sé que nadie lo vió venir.
Pero es lindo, porque tal vez sea como un libro de filosofía para empezar con todo ésto, ya que si una se pone altiro a leer sobre cosas mas cabezonas, como la existencia misma, la moral, la ética, la libertad y esos conceptos taaaaaaaan pero taaaan abstractos, corres el riesgo de terminar en algún callejón oscuro, lleno de prostitutas con sífilis intelectual... o qué se yo? estoy re loca.
Y ahí estaba yo leyendo, y en realidad llevo como la mitad del libro, pero ya he llegado a algunas conclusiones y he leído algunas cosas medio rescatables, como para empezar a "filosofar".
Por ejemplo, Henri... perdón, Don Henri (porque yo no me ando ná echando a los filósofos al bolsillo). Nos explica en su libro tres principios iniciales que se aplican a la comicidad (si, así le dice). El primero, es que es una cosa humana... no iré mas allá, pero creo que yo discrepo un poco, pero no lo puedo juzgar porque sus ideas son de otra época, así que bueh. Aunque él se refiere mas que nada a que si los paisajes o los animales no son graciosos por si solos por ejemplo, sino que nosotros les damos comicidad al atribuirle alguna caracteristica humana.
El otro, indica que para reírnos de algo o alguien es una cosa completamente carente de emocionalidad, y se limita a "la inteligencia". Es decir, que por ejemplo te puedes reír de alguien que amas, pero en los segundos en que te estás riendo de esa personas, estás restándole emocionalidad ya sea a la persona a la situación que te da risa.
Y el tercero, pero no menos importante, es que la risa es una cosa que requiere retroalimentación, ya sea real o imaginaria. Necesitas a alguien que entienda el chiste además que ti, a alguien que ría contigo, aunque sea imaginar que a cierta persona también se le hará gracioso "ayuda" a reír. Es por eso que nos desesperamos tanto por mostrar las cosas que nos parecen graciosas.
Otro punto que me pareció sumamente interesante, fue aquel que se refiere a que la risa es también un ente sancionador de ciertas conductas humanas. ¿Cómo así?
Pues que una de las características de un personaje de comedia, es que tiene actitudes que, si supiera está siendo observado y objeto de risa por dichas actitudes, probablemente las cambiaría o las escondería, ya que nadie quiere ser objeto de risa. Es así como "el miedo al ridículo" es en parte un mecanismo regulador de la sociedad.
Eso es a grandes rasgos... igual planeo escribir mas sobre mis conclusiones, porque el libro me salió 8 lucas, y tengo que hacerlas rendir.
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